La alcaldía de Panamá participó de la celebración de los 350 años del corregimiento de Santa Ana celebró con el programa de Panamá Ciudad Creativa Gastronómica.
La muestra contó con 10 puestos de cocina que ofrecieron desde “chillidogs” hasta chicharrones, pasando por nachos y “saus” y, como especialidades bacalao, pescado frito en escabeche y otros platos propios del Arrabal de Santa Ana.
Además, 9 puestos de venta de bisutería, pañoletas, adornos, dulces variados, plantas y macetas completaron la oferta que fue disfrutada por residentes y transeúntes, especialmente por varios grupos de turistas en su mayoría extranjeros que se detenían a disfrutar la oferta gastronómica.
El Arrabal de Santa Ana celebra, junto a la fecha de la patrona, una serie de actividades enfocadas en resaltar la parte históricas, las cuales han dado paso a la consolidación de Panamá como país soberano e independiente.
Para esta celebración, el concejal exaltó en papel de la Junta Comunal de Santa Ana, del Patronato Fundación del Arrabal de Santa Ana, de la Parroquia de la comunidad y de la Alcaldía de Panamá, organizaciones en cuya responsabilidad descansó este programa.
Por su parte, Jazmín Valera, por su parte, organizadora de la muestra gastronómica indicó, que “el corredor gastronómico de Panamá Ciudad Creativa Gastronómica es básicamente una exposición de los cocineros y cocineras del área de Santa Ana y áreas aledañas de su gastronomía y de la cultura culinaria de la ciudad. Su busca incentivar el consumo de los platos criollos y promover la recuperación económica del área.
La Alcaldía de Panamá apoyo esta celebración de los 350 años de Fundación del Arrabal de Santa resaltando especialmente el papel que este asentamiento humano desempeño en el desarrollo del país y de los personajes políticos y sociales que produjo, tales como Buenaventura Correoso, y una élite de mulatos letrados, que se destacan por su inteligencia y educación: Juan Mendoza, Mateo Iturralde, Benjamín Ruiz, Rafael Aizpuru, José María Llorente (padre), José Dolores Urriola, y Faustino Antonio Figueroa, quienes convirtieron a la Plaza de Santa Ana en el ágora del pueblo.
La relevancia de la celebración de los 350 de Fundación del Arrabal de Santa Ana radica en el papel histórico, cultural, político y social en este evento, el cual, desde sus inicios se ha constituido como patrimonio esencial del barrio fundado a extramuros del área de San Felipe, que devino como corregimiento de Santa Ana, destacándose valores culturales como paisaje histórico urbano, con un contexto popular, vibrante y creativo, que ha luchado a través de los años por la libertad, ocupando una relación indisoluble con la construcción de la nacionalidad panameña.