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Nadar te da la satisfacción de competir contigo mismo y vencer’

La transparencia de sus aguas hace de las nueve piscinas municipales una invitación a sumergirse en la actividad física y mental que por excelencia resulta en la más completa y exigente.

A partir de los 2 años y hasta la edad lo permita, miles de nadadores acuden a aprovechar las piscinas agitado sus aguas o animando desde las gradas en sus múltiples competencias.

Utilizar las piscinas municipales ‘no tiene un costo’ para los nadadores, se consigue un ingreso a estos sitios seguros, limpios y adecuados con un certificado de buena salud y dos fotos tamaño carné.

Aprendiendo

‘Aprendo a nadar’ es el programa predilecto para que los menores de 17 años conozcan a profundidad esta disciplina y la desarrollen hasta convertirla en una de sus habilidades.

Luego, a lo largo del año, los niños entrenan animados por sus padres que los llevan a practicar de 3 a 5 p.m. cuatro días a la semana con la aspiración de clasificar para ir a competir internacionalmente.

Ellos nutren clubes como Los Desfiles de Betania o los Pulpos de Villa Cáceres, donde novatos se convierten en avanzados y luego en máster de donde se elige a los que representar a Panamá.

La Alcaldía capitalina impulsa los viajes mientras los padres de familia realizan actividades de recaudación de fondos para sufragar los gastos extraordinarios.

Educando

Recurso humano de entidades aeronavales y estudiantes de escuelas marítimas tienen como segunda aula las piscinas municipales donde obtiene un dominio vital para su profesión.

Igual oportunidades tienen centros educativos, organizaciones e instituciones que aplican para incluirse en la agenda de oportunidad para conocer y practicar los beneficios del nado.

Sus óptimas condiciones de higiene y mantenimiento son el resultado de esfuerzos administrativos que se justifican cuando los chicos del barrios y gente de las comunidades acude a darse un chapuzón.

 Socializando

‘Nadando contra el estrés’ es el programa que invita a los mayores de edad para que después de una ardua jornada laboral se sumerjan durante una hora y se dejen abrazar por las aguas.

Las piscinas de Betania, Villa Cáceres, Pueblo Nuevo, San Francisco, Las Mañanitas, Chilibre y Alcalde Díaz fueron este año un centro para combatir el mal del siglo: la tensión.

Entre sus márgenes se forman, se forjan y fortalecen encuentros de nadadores que se conocen, se reúnen y se animan a ejercitarse en espacios que los unen en la amistad de este desafío.

Incluyendo

La Piscina de Pueblo Nuevo convoca a los nadadores especiales al PCD: Programa para Personas con Discapacidad, que reúne a niños y niñas con diversos grados de autismo y síndrome de Down.

Cada sábado de 7 a 10 a.m., bajo la mirada familiar, llegan puntualmente decididos a desarrollar sus destrezas físicas, a fortalecer sus cualidades emocionales y a ser felices.

Esta hidro dinámica, además de un ejercicio complejo, es un eje que logra hacer girar oportunidades múltiples de resaltar las cualidades humanas, más allá de lo esperado.

Entrenadores de larga experiencia cuidan con celo el aprendizaje y de la seguridad de los nadadores manteniendo un récord impecable en la atención a los usuarios.

De lunes a viernes, desde las 8 a.m., personal de la Subdirección de Deportes de la Dirección de Gestión Social espera por los nadadores para darles atención.

Conoce los horarios sabatinos ingresando al vínculo: https://atencion.mupa.gob.pa/piscinas/