La aplicación de microchips a animales domésticos permitiría protegerlos de robos, recuperarlos si se pierden y saber quiénes los abandonan, afirmó el director de Gestión Ambiental de la Alcaldía de Panamá, Mario Meléndez.
Adelantó que con este propósito autoridades del Ministerio de Salud y la Alcaldía de Panamá han sostenido varias reuniones a fin de establecer los mecanismos para establecer fórmulas para la tenencia responsable.
Explicó que el microchip es un dispositivo electrónico imperceptible e indoloro, del tamaño de un grano de arroz con un código con datos como dirección, teléfono y nombre de los responsables, que se implanta bajo la piel del animal.
Esterilizar es la respuesta
Se refirió al creciente abandono de animales por razones económicas, lo que es doloroso para un animal, porque como los refugios establecidos se han saturado rápidamente, luego de tener una familia, queda en la calle, indefenso.
Indicó que la experiencia en otros países es que en los albergues que refugian animales colapsan por sobrepoblación y se ven obligados a exterminarlos, lo que no es una opción para esta administración ni para los animalistas.
Reiteró que el control natal es la medida eficaz para prevenir camadas no deseada, por lo que además de donar más de 5 mil libras de alimento a hogares temporales, han impulsado 156 esterilizaciones, 261 vacunaciones y 6 adopciones en lo que va del año.
5 libertades del animal
Ante las intensas olas de calor y sus efectos, recomendó a los cuidadores de mascotas no pasearlas en horas pico, y en casa, mantenerlas a la sombra, hidratados, con agua limpia y en un área con suficiente ventilación.
Agregó que el Departamento de Bienestar Animal ha realizado 256 inspecciones en el 2023, y hace ingentes esfuerzos por combatir la crueldad y llevar a los maltratadores ante la justicia.
Recordó las 5 libertades que es deber brindarles a ese miembro del hogar:
1. Libertad de acceso a la alimentación adecuada e hidratación oportuna.
2. Libertad a un ambiente apropiado para su especie y tamaño.
3. Libertad a la buena salud, atención veterinaria, vacunas y medicación.
4. Libertad emocional, a la compañía, al buen trato, paseos y juego.
5. Libertad para expresarse como parte de su comportamiento natural.